Amo cantar. Y cuando canto, siento que mi universo interior se expande y se funde con las voces de los que cantan a mi lado. Las notas ondean , crecen, se elevan, para diluirse en el aire.
Cantar es formar parte de la Armonía, esa diosa pagana que embelesa los sentidos.
Es flotar al unísono con el latir profundo de la vida.